Nosotros
https://www.youtube.com/watch?v=QOD7DLiZPnY
“Azul en Verde” es un proyecto musical que fusiona la interpretación y la danza. Lo formamos dos músicos y una cantante, que a la vez es actriz y bailarina. No se le puede poner una etiqueta al estilo o sonoridad, ya que fusionamos muchos instrumentos y creamos distintos ambientes, ya sea con los ritmos, melodías y el contenido de la interpretación. Los instrumentos que usamos son, como base en la percusión: Darbukas, panderos, cuencos tibetanos, flauta de armónicos, percusión menor y ambiental. Y como instrumentos melódicos de cuerda: Guitarra (clásica, flamenca) violín y viola. Todo esto es incorporado en distintas piezas musicales al igual que la voz, que se usa para crear formas rítmicas, melodías y canciones. Por ello en algunos momentos se crea una sonoridad más oriental, mística o exótica, aunque sin ceñirse a ningún país concreto, ni ritmo popular y en otros momentos las canciones con guitarra y voz nos asientan más en occidente. Todo ello es puesto en escena junto con la interpretación, recitando textos con un mensaje introspectivo, existencial y filosófico, al que se le une la danza.
Hay que destacar también que muchos de los ritmos y canciones se van creando y grabando a tiempo real, con la ayuda de un pedal-loop. De esta manera, al igual que se hace en un lienzo, vamos introduciendo sonidos como el pintor que añade un azul, un verde, después un rojo y así se crea el efecto de un grupo de músicos tocando. Es interesante tener la posibilidad de ver como el espectador participa de ese proceso en directo.
Historia del proyecto
https://www.youtube.com/watch?v=bsJMY2FO5MU
Azul en Verde comienza en Madrid, llamándose en primer momento “Samaveda” compuesto por dos buenos amigos y músicos; Guy Gomez Alvarez y Julio Mateo Pedrosa. En Samaveda, sonaban más cuencos tibetanos y cantos difónicos, los temas, eran más percusivos, medios tiempos, usando poliritmias y la voz para crear las frases rítmicas. Había más improvisación y no atendía al formato de canciones o temas, sino al de sesiones, sesiones musicales con un trasfondo meditativo. Fue un proyecto bonito por muchos aspectos, pero la vida, lleva a uno de los músicos a Málaga y Samaveda, ya no puede seguir avanzando, dando sus últimos conciertos precisamente en esta tierra en el festival sacro-ritual de Riogordo y en la Sala Chelamar de Málaga, donde tienen el privilegio de contar con la colaboración de Ido Segal y de Ignacio Bejar. Es en Málaga donde se crea “Azul en Verde” con la incorporación de Celia Almohalla (actriz, cantante, bailarina y una castora de pies a cabeza) y al poco tiempo también se une Ana Sevilla, buenísima violinista y persona. Los ensayos más asiduos, las ganas y las ideas de los tres hacen que se cueza Azul en Verde. En este, se introduce la danza y la interpretación, se crea un guion definido así como, un tema a seguir en relación a cada canción. Sigue habiendo temas muy percusivos, medios tiempos, lentos, pero ahora se le añaden melodías de violín guitarra y letras, creando así canciones y un dialogo de reflexiones filosóficas. Esta es la historia a día de hoy y se sigue gestando.